Celebrando la Esperanza a través de los Bautismos y la Fe Reformada en Venezuela

Desde una edad temprana, el pastor José Piñero comenzó su camino cristiano bajo la guía divina, desarrollando un profundo entendimiento de las doctrinas de la gracia y la predestinación, pilares clave de la teología reformada. Asistió al Seminario Evangélico de Caracas, donde se consolidó su compromiso con la fe reformada. Un pastor misionero de la Iglesia Reformada lo animó a leer obras de teólogos como Louis Berkhof y las Instituciones de la Religión Cristiana de Juan Calvino, lo que reforzó aún más su orientación hacia la tradición reformada.

Aunque inicialmente comenzó su ministerio de manera independiente, el pastor Piñero pronto reconoció la necesidad de afiliarse a una denominación que le brindara tanto responsabilidad como apoyo. A través de Mirtha Villafañe, plantadora de iglesias y líder local de misiones con Resonate, y Harold Caicedo, presidente del Consejo Latino, Piñero encontró una comunidad reformada que compartía su compromiso teológico. En su búsqueda de una denominación fiel a las Escrituras, se dio cuenta de que la Iglesia Cristiana Reformada en Norteamérica (CRCNA) se alineaba más con su visión que otras, las cuales, en su opinión, se habían desviado hacia adaptaciones culturales. Finalmente, se unió a la CRCNA a través del Clasis California Sur.

Una Iglesia de Migrantes

Piñero ahora lidera el Centro Cristiano de Los Teques en Venezuela, una iglesia caracterizada por su dinamismo y por ser una congregación de migrantes. Debido al complejo contexto socio-político del país, muchas familias se ven obligadas a emigrar, lo que resulta en un flujo constante de personas que entran y salen de la iglesia. "Venezuela está experimentando una crisis en la que la desesperanza ha afectado a muchos, y la mentalidad de muchos jóvenes y familias es migrar en busca de mejores oportunidades," explicó Piñero. Este fenómeno ha impactado la dinámica de la iglesia; en su apogeo, la congregación tenía más de mil miembros, pero ese número ha fluctuado continuamente debido a la emigración.

A pesar de este reto, el pastor se asegura de que la iglesia permanezca activa, integrando constantemente a nuevos miembros y manteniendo el enfoque en el discipulado de niños, jóvenes y adultos. "Aunque hay un flujo constante de personas, siempre nos aseguramos de que todos estén en un proceso de aprendizaje y participación en la iglesia, especialmente los más jóvenes", afirmó. El Centro Cristiano de Los Teques sigue siendo un hogar para aquellos que buscan acercarse a la fe reformada y al amor de Cristo. En medio de este constante movimiento, la iglesia no solo persiste, sino que mantiene la misión de ser un lugar donde el bautismo se convierte en un testimonio público del renacimiento a una nueva vida en Cristo, tal como se muestra en un video de los recientes bautismos de varios nuevos miembros.

La Importancia del Bautismo

Según el Pastor Piñero, el bautismo es un sello de unión con Cristo, simbolizando la purificación y la entrada en la comunidad de los creyentes, reafirmando el compromiso con la vida cristiana y el testimonio de la obra redentora de Dios. “El bautismo, para nosotros, es un símbolo de la promesa de Dios, un acto que celebra la esperanza, incluso en medio de la crisis,” expresa Piñero. Para él, la realidad que viven muchos venezolanos está llena de desafíos, pero el bautismo representa una verdad eterna: la gracia de Dios está presente. 

"Esta ceremonia no es meramente un rito, sino una declaración de fe que afirma que, a pesar de las dificultades, Dios continúa trabajando en sus vidas," dijo Piñero. En cuanto a las prácticas de bautismo, el pastor Piñero enfatizó que su iglesia prioriza el bautismo por inmersión, aunque aceptan la aspersión en casos excepcionales, como cuando los adultos mayores no pueden ser completamente sumergidos en agua.

El Bautismo en Niños y Adultos

El bautismo infantil es un acto que subraya el compromiso de la iglesia reformada con la fe y la promesa del pacto de Dios. "Es un recordatorio de que los hijos de los creyentes también son parte del pacto de Dios," explicó Piñero. En un país donde muchas iglesias no practican el bautismo infantil, la iglesia reformada de Los Teques destaca por incorporar a los más pequeños desde una edad temprana en la vida de fe. El bautismo de adultos también es un testimonio de esperanza. Ver a adultos decidir bautizarse es un acto de fe. "Es un signo poderoso de la gracia transformadora de Dios en la vida de las personas," comentó Piñero. 

Incluso cuando los miembros migran a otras tierras, el Pastor Piñero les recuerda que el bautismo es un sello de pertenencia a la familia de Dios, sin importar dónde se encuentren. Cada bautismo es una celebración pública de la esperanza en Cristo. Venezuela enfrenta una realidad política y económica compleja, y la iglesia no es inmune a los desafíos. La "desesperanza aprendida", como la describe Piñero, es un fenómeno palpable entre la población, pero la iglesia sigue siendo un lugar de refugio espiritual. “Muchos llegan a la iglesia buscando esperanza en medio de la desesperanza. Nuestro reto es mantener la convicción de fe en un contexto donde parece que el caos predomina", reflexionó. A pesar de los desafíos, la iglesia se esfuerza por no solo mantener su identidad reformada, sino también adaptarla a su contexto local, entrenando a líderes y preparando a los migrantes que se van para que actúen como misioneros dondequiera que se establezcan. 

Formación Activa y Permanente 

Piñero pone un gran énfasis en la formación espiritual de los niños. "Si la iglesia no intenta alcanzar a los niños, está destinada a morir", advirtió. A través de programas como el museo de la Biblia, donde los niños tienen la oportunidad de enseñar a los adultos, y la enseñanza del Catecismo de Heidelberg, busca crear un vínculo fuerte entre las nuevas generaciones y la identidad reformada. Además, la iglesia organiza actividades como el plan vacacional, donde los niños aprenden de memoria el Credo Niceno y el Padre Nuestro, subrayando la importancia de que desde pequeños internalicen los fundamentos de la fe. "Es crucial que la próxima generación esté bien formada en su fe y en su identidad reformada", añadió Piñero. 

Bajo el liderazgo y dinamismo del Pastor José Piñero, la iglesia reformada en Los Teques celebra la esperanza de la gracia de Dios, asegurando que cada miembro, desde los niños hasta los adultos, continúe creciendo en su fe. El bautismo sigue siendo un acto de que conecta a los creyentes con la promesa de una esperanza en Cristo.