Gran parte de lo que creemos es propiedad común de la iglesia cristiana alrededor del mundo y a través de las edades. Tres credos adoptados por la iglesia mundial hace siglos resumen los puntos más importantes de nuestra fe: el Credo de los Apóstoles, el Credo Niceno y el Credo Atanasiano.
Para resumir estas creencias comunes, usaremos el texto del Credo de los Apóstoles. Pero primero una explicación. A pesar de su título, el Credo de los Apóstoles no fue escrito por los apóstoles o discípulos que caminaron y hablaron con Jesús en el primer siglo. En cambio, es una recopilación de lo que los creyentes de los primeros siglos sabían de los testimonios orales y escritos de los apóstoles, que luego fueron destilados en las principales enseñanzas de la fe cristiana. Este credo fue reelaborado por los sucesivos concilios de la iglesia primitiva y se adoptó en su forma actual antes del final del siglo IV.
Una mirada rápida a la estructura del Credo de los Apóstoles revela una de las verdades fundamentales de la fe cristiana: la Trinidad. El credo se divide en tres partes: Dios Padre, Dios Hijo, y Dios Espíritu Santo. Todos los cristianos creen que la Biblia revela a un Dios en tres “personas”. En otras palabras, Dios es una perfecta comunidad de amor.
Dios
Creo en Dios
El credo comienza con una simple afirmación de la creencia en Dios. Las tres secciones siguientes describen a las tres personas de este único Dios.
Dios Padre
Padre, Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra.
La primera persona de la Trinidad es aquella a quién Jesús nos reveló como “el Padre”. Dios no es una entidad espiritual remota e incognoscible. Más bien, Dios es nuestro Padre celestial amoroso y poderoso.
Contra todas las demás ideologías sobre el comienzo del mundo, profesamos que Dios creó el cielo y la tierra y todo lo que está en ellos. Esta profesión afirma la bondad de la creación y reconoce en ella significado y propósito.
Además, todo lo que es bueno y hermoso apunta a un Dios Creador. De esa forma, todos los seres humanos pueden saber algo acerca de Dios a través de lo que la creación revela.
Dios Hijo
Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor,
Que fue concebido por el Espíritu Santo
Y nació de la virgen María.
Sufrió bajo Poncio Pilato,
Fue crucificado, muerto y sepultado;
Descendió a los infiernos.
Al tercer día resucitó de entre los muertos.
Subió a los cielos
Y está sentado a la diestra de Dios Padre todopoderoso.
Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y a muertos.
Afirmamos que Jesús de Nazaret, concebido milagrosamente por el Espíritu de Dios y nacido de una mujer (vea Lucas 1:26-38), es completamente humano así como completamente Dios, él es el Hijo de Dios, la segunda persona de la Trinidad.
Como el Cristo, Jesús cumplió todas las profecías del Antiguo Testamento acerca de el Mesías que redimiría al pueblo de Dios. La vida, la muerte y la resurrección de Jesús están basadas en hechos históricos.
Después de terminar su obra terrenal de redención, Jesús tomó su lugar en el cielo como Señor de todas las cosas. Él vendrá otra vez para renovar todas las cosas.
Dios Espíritu Santo
Creo en el Espíritu Santo,
la santa iglesia católica*,
la comunión de los santos,
el perdón de los pecados,
la resurrección de la carne,
y la vida eterna. Amén.
*Es decir, la verdadera iglesia cristiana de todos los tiempos y de todas partes
Cuando Jesús ascendió corporalmente al cielo, prometió a sus discípulos un consolador, una fuente de poder que los llevaría “a toda la verdad” (Juan 16:13). Este don es el Espíritu Santo. Desde entonces, el Espíritu Santo ha habitado en el pueblo de Dios, dándole poder.
El Espíritu Santo es la presencia y el poder de Dios con nosotros aquí y ahora, guiando a la iglesia, uniendo al pueblo de Dios, aplicando el perdón de Dios a nuestras vidas quebrantadas, hablándonos y estimulándonos individual y comunitariamente a vivir piadosamente.
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The text above has been excerpted with permission from a brochure entitled The Christian Reformed Church: Who We Are and What We Believe, © 2018, Faith Alive Christian Resources, Grand Rapids MI. Print copies are available for purchase. No part of this may be reproduced in any manner whatsoever without written permission from the publisher.