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Para el reporte completo y la declaración exacta de la postura de la denominación sobre un tema en particular, el lector debe buscar las referencias provistas.

Postura

El estado es instituido por Dios y es dotado won poderes para que pueda promover, dentro de los límites de su autoridad, el mantenimiento de la vida humana y su desarrollo de acuerdo a la ley de Dios. El estado es llamado a proteger a la iglesia con todos los medios que le ha otorgado Dios para que la libertad de consciencia de servir a Dios sea garantizado, y que poderes anti-cristianos que amenazan a la iglesia sean resistidas y prevenidas.

La iglesia reconoce y honra al estado por sus poderes recibidos de Dios y el servicio, fielmente proclama el evangelio a todos en el estado, ora por toda la gente, incluyendo a aquellos que están en autoridad, para que todos lleven una vida quieta y apacible (1 Tim. 2:1-2). El estado no debe asumir el derecho y el poder de el único Red de la iglesia, Jesucristo, y debería reconocer que la iglesia le debe alianza y responsabilidad solo a EL.

Historia

La discusión de este tema en la ICR se centró sobre las preguntas que surgieron acerca del Articulo 36 de la Confesión Belga. En 1943, un comité fue nombrado para estudiar el tema. Sus propuesta primero fueron enviadas al Sínodo Reformado Ecuménico, el cual en 1949 adopto una declaración acerca de la relación entre la iglesia y el estado. Esta declaración fue aprobada por la ICR en 1958 como una revisión del Articulo 36 de la Confesión Belga. (La traducción previa en Ingles fue juzgada como no bíblica porque afirmo que era la obligación del estado asegurarse que la Palabra del Evangelio se predicara en todo lugar).

Referencias a Las Agendas y Actas del Sínodo

Acts of Synod 1938, pp. 16-20
Acts of Synod 1943, pp. 107-14, 415-51
Acts of Synod 1946, pp. 38, 398-428
Acts of Synod 1947, pp. 83-85
Acts of Synod 1952, p. 68
Acts of Synod 1954, pp. 49-50
Acts of Synod 1958, pp. 28-31, 174-80
Acts of Synod 1963, pp. 36, 466-67
Acts of Synod 1964, p. 71
See also Belgic Confession, Article 36; and the 2008 version of Our World Belongs to God: A Contemporary Testimony, Articles 52-54.